Sí, me lo quiero comer,
lo interesante no es eso,
lo que verdaderamente importa es
¿dónde me lo quiero comer?,
algo que tengo claro,
muy claro,
es que no es donde me encuentro ahora.
Este lado de la mesa donde lo he venido haciendo
me llena mucho,
-satisfacciones personales-,
no tengo queja alguna.
Pero, el sabrosador utilizado ya no es el mismo,
no es la misma cacerola,
no es la misma receta de abuela,
-aquella que tanto bien hizo-,
no es hecha con amor,
el fuego es mas alto,
solo falta que hasta el chef no sea el mismo.
Sí me lo podría comer desde aqui,
Y sigo siendo bien recibido,
Pero yo elijó de que lado de la mesa sentarme.
Eso es lo que me esta mortificando.
1 comentario:
esto me gusta.. el lenguaje ese. felicidades!!! no porq t querras cambiar d cafeteria, o cocina¿?, sino por como lo decis, y ademas la inconformidad siempre es buena, sobre todo si hacemos algo para cambiar lo q nos molesta..
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